Si estás interesado en presentarte a unas oposiciones, te enseñamos los tips y consejos que debes tener en cuenta a la hora de estudiar para una oposición.
En este artículo encontrarás diferentes tips y consejos que debes tener en cuenta para preparte, como por ejemplo: errores a evitar en tu preparación, cómo organizar los apuntes, tips para reducir las horas de consumo del móvil y cosas que haces mal durante el estudio.
6 errores a evitar en tu preparación
1. “La forma de aprobar la teoría es hacer muchas preguntas”
Es un gran error, sin una buena base de teoría.
Primero tienes que estudiar, conocer el temario y, como mucho, echarle un vistazo para saber que tipo de preguntas puedes encontrarte.
Después de haber estudiado el temario, puedes hacer muchas preguntas para ver las diferentes maneras en que pueden preguntar sobre el mismo contenido. Para ello te recomendamos hacer todos los tests del campus virtual.
2. Subestimar las pruebas de psicotécnicos aptitudinales
Muchas veces destinamos mucho tiempo en el estudio de temario -sobre todo, porque vemos más resultados a corto plazo- pero las pruebas de psicotécnicos aptitudinales requieren, incluso, más nota para aprobar.
Muchas veces marcan la diferencia entre aprobar y tener plaza.
No subestimes ninguna prueba, aunque pueda ser menos rasca por ti.
3. Considerar que los psicotécnicos aptitudinales requieren poco tiempo
Siguiendo con el punto anterior, adquirir cada aptitud demandada –matemática, verbal y abstracto– es el fruto de trabajar muchas pruebas diferentes y saber exactamente cómo llegar a la solución. Esto implica constancia y repetición, por el que es importante trabajarlos de forma habitual.
Aprenderte las respuestas de los tests que trabajas de memoria no tiene mucho sentido, puesto que una pequeña variación puede hacer que la respuesta correcta sea otro.
Lo mejor es cogerlos con tiempo antes del examen e ir haciendo y mejorando constantemente.
4. “Primero hago esto, que me gusta más”
¿Realmente piensas que después, cuando estés más cansado/da, tendrás más ganas de hacer el que te cuesta más?
Cuando una cosa no nos gusta, no nos motiva hacerla cuando estamos cansados, y además la encontramos más complicada.
Por eso, procura hacer primero lo que menos te gusta y después “recompénsate” dedicando tiempo a aquello que te gusta más y que, seguramente, puedas hacer con más facilidad.
5. “Como no estoy loco” no necesito preparar la parte de personalidad
Nada más lejos de la realidad. Hay unas “reglas del juego” que tienes que conocer, tanto en las tests de personalidad, competencias y psicopatologías, como en la entrevista.
Si llevas meses preparándote para las otras pruebas, ¿qué te hace pensar que esta requiere menos esfuerzo? No puedes dejar una de las partes finales al azar.
Lo mejor es prepararlo con profesionales del ámbito (no gente que está dentro del cuerpo), que tengan años de experiencia y especializados en cuerpos de seguridad, y que tengas la certeza de que sus resultados son positivos.
6 . Pensar que la entrevista “es una entrevista de trabajo como cualquiera”
Cada vez más, se trabaja por competencias del lugar de trabajo ofrecido en la oposición y las entrevistas no son fáciles, tienen unas características muy concretas.
De hecho, la entrevista suele ser una de las pruebas más difíciles, en especial, debido al grado de subjetividad que tiene. La percepción que tengan los entrevistadores sobre nosotros determinará el éxito o fracaso de la misma.
Por esto, es necesario que tengas las herramientas para salir del paso en aquellos momentos en los que los entrevistadores intenten ponerte nervioso o tengas dudas sobre como contestar.
La forma en cómo comunicas, verbal y no verbalmente, tu storytelling, te hará ganar o perder puntos. Conocer el tipo de perfil que buscan también te ayudará a concretar mejor tus respuestas y a ser más efectivo con la información que darás.
Por esto, y muchos otros motivos, es importante que dediques tiempo a preparar y ensayar esta fase de la oposición.
Cómo organizar tus apuntes (con plantillas incluidas)
Especificando en el tema de las oposiciones, nos encontraremos que el estudio consiste en:
- Teoría
- Cultura General/Actualidad
- Psicotécnicos
Por ello, hoy trabajaremos con dichos elementos para preparar nuestra organización, pero tú puedes adaptarlo en función de tus necesidades. También dependerá de la facilidad que tengas en una u otra cosa para organizar el tiempo que le dediques; pero el objetivo de este post es que no dejes nada atrás, porque de nada te sirve aprobar una cosa si no apruebas otra.
1. Sé realista con el tiempo del que dispones
Para hacer toda la organización de la preparación tienes que amoldar el planning a ti, no el planning a tu vida. Tienes que mantener tus obligaciones, hábitos, tiempos… porque si lo haces al revés no conseguirás lograr todo lo que te propones y te desanimarás.
También tienes que ser consciente de cuánto tiempo tienes para dedicarte, siendo realistas y sinceros con uno mismo. Esto no implica reducir las horas de descanso o marcarte metas imposibles, como por ejemplo, levantarte cada día a las 4 de la mañana para estudiar 6 horas.
Así, cuando dividas los temas de estudio para estudiar podrás ponerte metas asumibles y no te generará estrés ni tener que rehacer cada día el planning por no haber logrado los objetivos.
2. Mantén tu material bien organizado
Hay infinitas maneras de mantener ordenado el material, ya trabajes en formato digital o físico.
De ésta manera te aseguras de tenerlo todo a mano cuando lo necesites, y aún más importante, que no te olvidas nada que tengas que trabajar.
A grosso modo, puedes organizarlo en grandes bloques, por ejemplo, por pruebas:
- Bloque 1: Teoría
- Bloque 2: Psicotécnicos
- Bloque 3: Actualidad
- Bloque 4: …
A partir de aquí, puedes ordenar cada bloque de diferentes maneras, dado que son cosas distintas y tal vez la organización más adecuada para una no es la mejor para la otra. Por ejemplo: el temario lo puedes ordenar por temas, los psicotécnicos por fecha en lo que los hayas trabajado en clase o bien por aptitud, la actualidad por meses…
3. Que tanto volumen no sea problema
Si trabajas en formato físico, tal vez hayas reunido ya montones y montones de hojas y te sientas abrumado.
Puedes organizarlo en carpetas de colores, con el título en la tapa para saber lo que contiene en el interior sin tener que abrirla una a una. Los colores pueden depender por ejemplo del ámbito de estudio o la prueba que prepara. Además, es la opción más portable, porque puedes coger la carpeta que quieres estudiar ese día sin necesidad de ir cargado con todo.
Otra opción es disponer de bandejas de oficina e ir dividiéndolo por plásticos. Ten en cuenta que esta opción es la menos portátil, por lo que si tienes que desplazarte para estudiar, te recomendamos que uses otra técnica o la combines con otras como las carpetas.
También puedes usar carpetas con separadores, de esta manera lo tienes todo junto en una misma carpeta pero a la vez dividido en subapartados.
Todo es encontrar la manera que más se adecúe a tí y te sea más sencilla de mantener.
4. Usa plantillas
Las plantillas te serán útiles para muchas cosas: controlar tiempos, organizar lo que quieres hacer durante el día/semana/mes, tener una visión de qué has estudiado y qué te queda…
En este apartado nos centraremos en las últimas, dado que son aplicadas a la organización del estudio.
En el campus dispondrás de las plantillas necesarias para vuestra oposición, desglosadas y adaptadas en función del temario que tenéis que trabajar.
De esta manera podrás hacer un seguimiento de qué has subrayado, esquematizado, estudiado… y en una hoja tendrás toda la información necesaria para organizarte el estudio y tener en cuenta qué te falta.
También es una manera de ver cuánto has progresado y te ayudará a mantener la motivación!
6 tips para reducir las horas que le dedicas al móvil
¿Por qué te interesa este post?
- Para tener más tiempo disponible para el estudio
- Para mejorar tu nivel de concentración y atención
- Para hacer más efectivo tu estudio: estudia más y mejor, en menos tiempo
- Reducir distracciones
¡Muchas veces no somos conscientes del uso intensivo que le hacemos a nuestro smartphone, y te puede sorprender la de horas que pasas delante de la pantalla!
1. Sé consciente del tiempo que le dedicas al móvil
El objetivo es que seas consciente de cuánto y cómo utilizas tu dispositivo.
Algunos móviles te muestran las estadísticas sin necesitar una app externa, no obstante, existen múltiples aplicaciones que ayudan a regular el uso del móvil, como, por ejemplo: bienestar digital, de Google.
Después de verlo… ¿Te has planteado qué podrías hacer con todo ese tiempo?
2. Borra todo aquello que no necesites o no uses
Muchas veces el móvil es una herramienta de trabajo, pero también puede ser un objeto de distracción (Redes sociales, juegos…).
Plantéate qué aplicaciones usas, y si quieres usar todas las aplicaciones.
Es una manera de no caer en la tentación de entrar en una aplicación que no te aporta nada y además en muchas ocasiones te incita a gastar dinero.
Si crees que alguna vez te harán falta, ya las instalarás 🙂
3. Temporízate el uso de las aplicaciones
A veces podemos perder la noción del tiempo mientras vemos las redes sociales o jugamos a través del móvil. ¿En qué momento ha pasado media hora? ¿Te suena?
En la misma aplicación de Bienestar digital, podrás establecer temporizadores diarios de todas las aplicaciones que tienes instaladas. Una vez hayas gastado el tiempo diario, no podrás abrir la aplicación.
De esta manera te aseguras de no ser absorbido por el móvil, haciendo un uso responsable y pudiendo dedicar más tiempo a otras cosas.
4. Elimina las notificaciones
Muy a menudo recibimos notificaciones. Una clasificación rápida de las notificaciones más habituales sería: recordatorios, mensajes instantáneos y notificaciones vacías de aplicaciones instaladas para que las uses.
¿Realmente te es imprescindible que te notifiquen que uno de tus contactos está en una red social? ¿o que x persona ha colgado una publicación?
En el apartado de ajustes de notificaciones, podrás decidir qué notificaciones quieres ver en la pantalla de bloqueo, cuáles quieres que suenen, o vibren, o te aparezcan en la barra de notificaciones e incluso temporizarlo en función del horario.
Tienes muchas posibilidades para deshacerte de las que no te interesan y te crean una distracción, ¡aprovéchalo!
5. Utiliza el modo no molestar
Cuando vayas a estudiar o hacer cosas que requieran concentración y tranquilidad -como dormir-, usa el modo no molestar de tu teléfono. Avisa a tus personas más cercanas de que estarás ocupado y desconéctate.
De esta manera ni las notificaciones ni las llamadas te interrumpirán (puedes configurarlo para que ciertas llamadas te suenen, o se active y desactive a cierta hora).
6- El móvil no es una obligación
No sientas la necesidad de estar conectado todo el tiempo. Siéntete libre de responder los mensajes cuando te apetezca (si no estás en el trabajo, claro 😉 ).
Si hay alguna cosa urgente o que debas saber inmediatamente no será mediante un mensaje de Instagram o WhatsApp, sino una llamada.
En todas las opciones anteriores, podrás configurarlas de manera que solo te suenen las llamadas, e incluso solo llamadas de unas personas concretas, o que te hayan llamado diversas veces repetidas.
6 cosas que haces mal durante el estudio y cómo corregirlo
1. No planificarse previamente
Es imprescindible tener unos objetivos claros y precisos, te recomendamos tener unos semanales e irlos distribuyendo en metas diarias.
Para ello puedes encontrar muchas maneras diferentes para organizarte y distribuir tu tiempo; solo hace falta que encuentres la que más se adecúa a tus necesidades y tu día a día -trataremos maneras de planificarte en otro post ;)-
Las metas que te propongas tienen que ser realistas, ni muy ambiciosas, porque no podrás cumplirlo y te desanimarás, ni muy vacía donde te quede mucho tiempo sin nada que hacer.
Para mejorar tu planificación puedes…
- Tener una planificación global de todo lo que tienes que hacer. Por ejemplo, si tienes un examen de 7 temas tenerlos todos en un cuadrante, e incluso por apartados.
- Establecer cada día unos objetivos. Esto puedes hacerlo a principio de semana y ya programar todos los días siguientes. Si prevés que es fácil tener algún contratiempo, te recomendamos que lo hagas la noche anterior o incluso al levantarte.
- Adaptar la planificación a tus necesidades. No a todos nos sirve el mismo método, tendrás que buscar e ir probando hasta que encuentres con el que te vaya mejor
- Tener tareas comodín. Para aquellos días que tengas tiempo de sobras porque hayas acabado lo que te habías planeado, busca tareas que puedas ir haciendo para esos últimos minutos: tests, repaso de noticias…
La falta de planificación nos lleva al siguiente punto:
2. Dejarlo todo para última hora
El dejarlo todo para los días antes del examen genera estrés y angustia. Además, el tiempo de estudio no será efectivo por varios motivos:
- El estrés hará que no logres centrárte en la tarea
- Estudiarás de una manera superficial, por lo que no adquirirás conocimiento, solo memorizarás unos datos que olvidarás al poco tiempo
- No te dará tiempo a trabajar todo el temario
Para evitar esto es importante trabajar poco a poco e ir repasando de vez en cuando lo que ya hayas pasado. Por ejemplo, un día puedes leer y subrayar el temario, otro día haces resúmenes o esquemas, y otro día prácticas con tests lo que has estudiado.
Esto es perfectamente aplicable a las pruebas físicas: la condición física requiere tiempo. De esta manera te aseguras de obtener la mejor nota y reduces la posibilidad de lesionarte por forzar.
Cómo puedes mejorar?
- Lleva una planificación adecuada y cúmplela
- Sé constante, con poco tiempo al día, a final de mes habrás avanzado más de lo que crees!
- Busca la motivación en pequeñas cosas, date alguna recompensa. Por ejemplo: por cada tema bien estudiado le dedicaré un tiempo extra a algo que me gusta más
3. No dormir el tiempo suficiente
Muchas veces no le damos la importancia que tiene el dormir las horas correspondientes, ya no solo por la cantidad, sinó la calidad.
Para ser eficaz a lo largo del día, tanto en el estudio como en el resto de tareas, es necesario dormir las horas que tu cuerpo requiere -acostumbran a ser recomendables unas 8h-. De esta manera te sentirás más activo y productivo a lo largo del día, además, estarás de mejor humor.
Algunas cosas que te pueden ayudar:
- Irte a dormir i levantarte cada dia aproximadamente a la misma hora
- Evita los aparatos electrónicos como la televisión, el móvil, la tablet… como mínimo 30 minutos antes de irte a dormir. Un libro o e-book puede ser una buena alternativa 🙂
- Procura no tomar cafeina o otros estimulantes durante las horas previas al descanso
- Evita las comidas copiosas durante las cenas
4. Privarte de hacer cosas que te gustan
Si bien es cierto que si estás opositando tendrás que dejar de lado alguna cosa, no implica que tengas que estar 24 horas al día los 7 días de la semana opositando. Hay tiempo para todo, aunque no te lo parezca.
Si tienes una correcta organización y cumples con los objetivos, siempre le puedes dedicar tiempo a hacer aquello que te gusta: leer, tocar algun instrumento, jugar, quedar con amigos… Te irá bien desconectar del estudio y hará que lo retomes con más ganas y estés más receptible a adquirir nuevos conocimientos.
Cómo lo puedes lograr?
- Resérvate unas horas a la semana para disfrutar de lo que te guste
- NO TE SIENTAS MAL. Tienes que permitirte un tiempo para ti y para los que te rodean, eso no repercutirá negativamente en tu objetivo, al contrario!
5. Estudiar de cualquier manera y en cualquier lugar
¿Quién no ha estudiado nunca en el sofá?¿Y con la televisión de fondo?¿Has estado estudiando en un bar? Para tener un tiempo de estudio de calidad no te sirve!
El trabajo se debe realizar en un sitio tranquilo, que tenga las menos cosas posibles pero a la vez tengas a mano todo lo que necesites. La idea es que durante el tiempo de estudio no tengas que levantarte de la silla.
Cómo mejorarlo?
- Busca un sitio tranquilo, con luz suficiente -a poder ser natural- y silencioso
- Procura que ese sitio sea solo para trabajar
- Evita las distracciones: ten a mano aquello que no necesites, desconecta dispositivos electrónicos…
- Si tienes costumbre de tomar café, infusiones (…) mientras estudias, prepáratelo antes de ponerte a trabajar. Un termo puede serte útil para las tardes de invierno 🙂 O si no, siempre va bien tener una botella de agua a mano
6. Estudiar únicamente usando la repetición
Si bien es cierto que mediante la repetición se pueden memorizar muchas cosas, no es el método más adecuado para un estudio eficaz.
Siempre habrá alguna cosa que se tenga que memorizar si o si, y quizá la repetición es, puntualmente, una solución. Pero lo cierto es que es resultante a corto plazo, ya que al poco tiempo lo acabarás olvidando.
Existen infinitas técnicas de estudio, de las cuales muchas tienen el objetivo de ayudarte a memorizar cosas como números, nombres… un ejemplo es el siguiente:
Como ves, el famoso 4-9-1-1 de la Constitución Española puedes aprenderlo mediante repetición, o con asociaciones: la A es similar al 4, la T al 9…
Solo hace falta encontrar el truco más adecuado en función del temario que quieras aprender.
Si te ha gustado saber los diferentes tips y consejos que debes tener en cuenta para estudiar una oposición, te recomendamos que leas los diferentes consejos sobre el temario y los psicotécnicos antes del examen, consejos para mejorar tus resultados en los psicotécnicos aptitudinales y consejos prácticos para los psicotécnicos aptitudinales y personalidad.